jueves, 4 de junio de 2015

¨Un Regalo para Papá: Contra las Canas y Arrugas¨



¡¡¡¡Estamos en el mes del padre!!!!
¿Y Por qué no hablar de esos héroes de la infancia y siempre?
Ese sentimiento que se tiene cuando nuestro padre está con nosotros. Nos sentimos intocables, indestructibles.
El primer amigo de juegos de un niño, el primer amor y Héroe de una niña.


 Recuerdo cuando estábamos comiendo, mi hija me dijo:
¨Mami yo soy una princesa, y mi papi mi caballero¨

Padre: El hombre de palabras sabias, protector y héroe de nuestras familias.

Sin duda un ser fundamental en nuestras vidas.
Todos recordamos cuando vimos las primeras canas de nuestros padres. Al menos yo si lo recuerdo.
Solo pude pensar una cosa:
Mi padre está envejeciendo…físicamente. Pues su corazón todavía era el de un joven.
El tiempo no es tan amigo de la piel ni el cabello, sobre todo si no cuidamos ellos cómo se debe.
Si bien nos da hermosos momentos, nos va marcando y el cuerpo…nos delata.

Hemos conocido jóvenes emocionados y desesperados por llegar a los 18 años.

Pero ¿Cuando hemos visto a alguien emocionado por verse las marcas de expresión o canas?
¡¡¡A NADIE!!!

Si bien las canas y arruguitas demuestran sabiduría.La mayoría quisieran deshacerse de ellas; para eso puedes usar El jabón de Romero, que es una rica combinación de Aceite de Oliva y Aceite de Coco, que protege nuestro cabello, detiene la caída y Lo mejor ¡¡¡OSCURECE LAS CANAS!!!
El Jabón de Romero es perfecto para las personas que son alérgicas a los shampoos líquidos.

Puedes regalarle a tu papá este Jabón para consentirlo, ya que hay muchos hombres que les salen canas, pero no quieren utilizar tintes ni químicos para oscurecerlo.
Que mejor que un Jabón de Romero, una solución sutil y natural.
Y porque hay padres que solo se lavan la carita antes de dormir puedes consentirle con algunos de nuestros jabones, que ayudan a combatir las arrugas, e hidratan la piel.
Porque la piel y cabello de nuestros papis también merecen ser consentidos.
También recordar que es el mes del Maestro, pero eso...
Hasta la próxima. .
                                             

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